Eventualmente, el cielo oscureció.
[...]
El olor era pastoso, húmedo, en sí no era fétido sino una mezcla de aromas a fango y sangre, con un toque de escurridiza amargura.
Guo Changcheng olfateó y consternado dijo, “¿Chu-ge?”
“Es el olor del rencor.” Chu Shuzhi no se dio la vuelta. Miraba hacia abajo, a la oscuridad. [...]
La cara de Chu Shuzhi se tensó, “Ya viene.”
[...]
El especial aroma se fue volviendo cada vez más intenso. Lin Jing [...] comenzó a repetir incansablemente las escrituras de trascendencia.
Esta solía ser un alma viviente que nació dentro de los Cielos y la Tierra, y que provenía de la esencia de la Naturaleza. Quizás era un alma nueva, o posiblemente era un alma que había reencarnado innumerables veces. Lin Jing no podía obligarse a ejecutarla tan violentamente, muy distinto a Zhao Yunlan.
Y sin embargo, su feroz cántico tenía tanto efecto sobre aquel como la música sobre un terco buey. El rencor no era aplacado, y el repetitivo balbuceo solo provocó que creciera más en medio del aire y que se extendiera como si se tratase de un colosal monstruo. El rencor aulló hacia el cielo y la noche iluminada por la luz de la luna rápidamente fue sumergida en una completa oscuridad.
[...]
Un estridente aullido llegó desde lejos. Lin Jing mantenía sus palmas juntas, bramando un mantra, pero entonces dio saltos hacia la rama de un árbol marchito. Enseguida una enorme esfera de humo negro chocó como una bomba sobre el lugar en donde estaba hace tan solo un instante; las baldosas en el suelo se partieron enseguida y cascajos volaron en el aire. Una inmensa figura apareció con un torbellino de viento, esta tenía tres o cuatro metros de alto, y poseía solo la mitad superior de su cuerpo pues todo lo que quedaban de las piernas eran huesos; gotas de sangre negra caían mientras caminaba, cada gota de sangre que resbalaba sobre el piso derretía las rocas a su paso.
[...]
Entonces, repentinamente la sombra flotó en el aire y de su interior, apareció el rostro de un hombre. Era el hombre que había visto Guo Changcheng: canoso y de ojos rojos.
[...]
Zhao Yunlan se inclinó y ayudó a Zhu Hong a levantarse. Él entonces se paró junto a la ventana, a tan solo unos cuantos metros de distancia del rencor que flotaba en el aire.
“Orden Guardian.” Dijo, como si se tratara simplemente de algún típico asunto policíaco, “Has muerto y no entraste apropiadamente al ciclo de reencarnación. ¿Casi es año nuevo y has decidido envenenar a las personas?”
Las palabras “año nuevo” parecían haber agraviado el rencor, este extendió su inmensa mano para, con un infinito remolino de humo negro, intentar sujetar el cuello de Zhao Yunlan.
La Orden Guardián se transformó en un látigo y creció como si se tratara de una vid viviente, deslizándose fuera de la manga del hombre y envolviendo la enorme mano. Tanto el hombre como el fantasma se encontraban en un punto muerto, parados sobre un montón de vidrios rotos.
[...]
Al siguiente instante, el rencor se retorció desprendiéndose del agarre del látigo del Guardián, mismo que se agitaba en el aire y se retrajo volviendo dentro de la manga. El rencor rugió y destrozó el marco de la ventana; una enorme nube de humo negro se apretó avanzando hacia el interior, casi reventando la pared.
Al mismo tiempo, Zhao Yunlan estaba parado detrás de él. Tenía ambas manos extendidas al frente, sus dedos extendidos y sostenía una daga con su mano derecha. Él silenciosamente hizo un corte en su palma izquierda. La sangre roja fluyó dentro del sujetador de la cuchilla, para enseguida dejar de moverse como si fuese solidificada.
Una sonrisa apareció en la cara del hombre.
Da Qing lo vio y su pelaje se le puso de punta, saltó alejándose y aterrizando en los brazos de Zhu Hong. Aquella sonrisa no parecía en lo más mínimo a la de Zhao Yunlan. En aquel instante, sus ojos eran increíblemente vacíos y su mirada amenazadora, la silueta de la nariz arrojaba su sombra sobre la mitad del rostro, y su boca se curvaba hacia arriba con una aterradora maldad.
Por un instante, nadie podía decir cuál de los dos era el verdadero fantasma.
“En las profundidades del infierno, escuchen mi llamado.” La voz tampoco parecía ser la de Zhao Yunlan; era profunda e inexplicablemente áspera, perforaba los oídos como una sierra desafilada, “Sangre como juramento, frío metal como prueba, préstenme tres mil de sus soldados. De los Cielos y la Tierra, hombres y dioses, nadie ha de sobrevivir...”
Las últimas palabras fueron pronunciadas con gran lentitud, una tras otra; eran indescriptiblemente aterradoras y turbulentas. La sangre en la daga se volvió negra, y una cantidad innumerable de armaduras vacías se abrieron paso a través de la blanca pared a su espalda, estas montaban esqueletos de caballos de guerra, blandiendo pútridas espadas, lanzándose al frente con la fuerza de montañas desintegradas y devastadores tsunamis. El rencor fue forzado a salir y una de sus manos rápidamente fue cercenada.
Zhao Yunlan trastabilló, como si estuviese agotado, y se recargó contra la pared, cayendo al piso bajo las miradas de terror de los demás. Bajó su mano, de la cual la sangre seguía fluyendo, y entre jadeos y resoplidos dijo, “Mierda, está toda sobre mis mangas, ¿podrá el lavado en seco limpiar esto?”
Da Qing caminó al frente hasta estar un poco más cerca de él, probando las aguas; se detuvo a medio metro de distancia y preguntó con precaución, “¿Yunlan?”
Zhao Yunlan elevó sus cejas, “¿Hum?”
El gato negro estaba familiarizado con esta mirada... [...] rugió, “¡¿Qué demonios fue eso?! ¡Nunca te enseñé este tipo de magia negra!”
“Los humanos leen, gato tonto.” Dijo Zhao Yunlan con presunción.
[...]
Traducción al español: Siboney69
Traducción al inglés: RainbowSe7en
Nota personal: ¡Puajajaja!
Primero les explicaré el origen del audio.
Cuando el drama “Guardian” seguía su emisión y una vez que llegó al episodio 39, los fans de la novela se sintieron defraudados porque a tan solo un episodio del final, Zhao Yunlan no mostró ninguna de sus características sobrenaturales descritas en la novela, a simple vista el ZYL del drama era un simple mortal común y corriente.
Así pues, como consuelo, Bai Yu compartió en su weibo un pequeño audio de sí mismo mientras recitaba el conjuro de magia negra usando en este capítulo.
Pues bien, enseguida alguien hizo la traducción en inglés del texto y explicó brevemente las circunstancias en que se da la lucha con el fantasma, pero aún así seguí esperando con ansias a que llegase la traducción de la novela hasta este capítulo...
¡*_* Tenía que compartirles el audio también!
Espero que les gustara (le hice un pequeño retoque revisando el texto original...) y que sigan disfrutando de la novela. Los sitios en donde pueden encontrarla se encuentran listados en la FICHA, así que no queda más que agregar.
Solo les dejo algunos otros fanarts correspondiente a esta escena...
Felices lecturas~~
PD: No se olviden que en mi canal de youtube podrán encontrar algunos videos que he subtitulado sobre los actores (Bai Yu y Zhu Yilong), mientras que en mi otro blog encontrarán traducciones de algunas de sus entrevistas y canciones (originales y covers).
Gracias
ResponderBorrarLa serie deja muchas incógnitas por resolver, afortunadamente, con la novela y estas aportaciones podemos entender un poco más la trama
Gracias