*Imagen al azar*
Título: 不知羞恥的王子 / The Shameless Prince / El príncipe desvergonzadoAutor: 蒙布朗 Meng Bu Lang
Extensión: Oneshot / Historia corta
Género: Comedia, Fantasía, Shounen Ai
Sinopsis: Este es un cuento de hadas lleno de cosas que no deberían ser descritas en un cuento de hadas.
* * *
Hace mucho mucho tiempo, existió una nación muy pequeña pero hermosa. El Rey de esta nación era amable mientras que la Reina era hermosa. Sin embargo, había un problema que los atormentaba. Y ese problema fue que no tenían ningún hijo.
La Reina oró cada día hasta que Dios finalmente le respondió.
Dios le dijo, “Oh, bella hija, ¿cómo era el Rey cuando lo conociste?”
La Reina respondió, “En ese entonces éramos muy jóvenes. La primera vez que me vio, su expresión en realidad contenía miedo.”
Dios le preguntó de nuevo, “¿Cómo era cuando te enamoraste de él?”
La Reina respondió, “En ese entonces, él ya era el Rey. Él era un hombre muy ocupado dado que todos los días tenía que manejar los asuntos de la nación.”
Dios le preguntó finalmente, “Entonces, ¿cómo era el día de tu boda?”
La Reina se sonrojó, “Humm.... ¿cómo debería ponerlo? Fue una lástima...”
Dios entonces le dijo, “Bien. Tendrás tres hijos. Sin embargo, ellos no serán perfectos. ¿Los amarás a pesar de aquellas imperfecciones?”
La Reina sin duda amaría a sus hijos. Ella le agradeció a Dios y entonces le contó enseguida las buenas noticias a su esposo.
No fue mucho después que la Reina fue capaz de dar a luz exitosamente a trillizos. Ella dio a luz a tres príncipes extremadamente saludables. El Rey y la Reina estaban colmados de alegría, y vieron como con el tiempo crecían sus hijos.
Sin embargo, las personas en el palacio pronto notaron que algo no estaba bien. La Reina recordó lo que Dios le había dicho antes. Aquellas palabras ahora se veían reflejadas en los tres príncipes.
El príncipe mayor fue llamado Breiv. Él era fuerte y apuesto, además de inmensamente valiente. Siempre ignoraba el peligro y hacía cosas que podrían horrorizar a los demás. Era un hombre que no conocía el miedo.
El segundo príncipe fue llamado Svenk. Su fuerza radicaba en el hecho de que era una persona trabajadora que no daba un paso atrás por el cansancio. El Rey y la Reina se preocupaban constantemente de que Svenk se enfermara por trabajar demasiado. Él era un hombre que no conocía las dificultades.
Sin embargo, el príncipe más joven cuyo nombre era Shaym, era un caso especial. Mientras que era igual de atractivo que sus hermanos, lo único que preocupó a los demás sobre desde temprana edad fue que él no conocía la vergüenza.
Él nunca tuvo un sentido del honor. Podía casualmente ser visto desnudo. También podía expresar apasionadamente su afecto hacia los demás. Lo que fuera que otras personas le dijeran que era inapropiado, él lo pensaba en su cabeza. Pero incluso después de reflexionar, seguía sin poder entender por qué debería de sentirse avergonzado. No importaba lo mucho que fuese educado al respecto, el Rey y la Reina se sintieron impotentes en cambiar la forma de pensar del hijo más joven. Al final, lo único que podían hacer era decirle, “Si no haces lo que digo, entonces nos enojaremos. Incluso si no entiendes el por qué, la única elección que tienes es obedecer.”
Sus amenazas funcionaron. Desde ese punto en adelante, el joven príncipe supo que necesitaba ponerse su ropa. También supo que no debía quitarles la ropa a los demás.
Los años pasaron. Los tres príncipes alcanzaron los diecisiete años. Fue en su decimoséptimo cumpleaños que el Rey realizó una gran celebración.
El castillo se llenó de música alegre y las calles fueron rociadas con pétalos de flores. Las personas se reunieron en la plaza frente al palacio y vieron al galante Rey con su encantadora Reina. Detrás aparecieron los tres jóvenes y atractivos príncipes.
En el día de la celebración, los príncipes tuvieron que entregar un discurso público y transmitir a las personas lo mucho que amaban a su nación. La celebración continuó sin problemas. Los tres príncipes fueron muy obedientes. Al final, se pararon uno junto al otro en la terraza, listos pata hablarles a las personas.
Breiv, quien no conocía el miedo, dijo, “Amo a esta nación tanto como amo mi espada. Mi espada me ayuda y nunca dejaré que se rompa.”
Svenk, quien no conocía las dificultades, dijo, “Amo a esta nación tanto como amo los libros, el equipaje, los caminos, las plantas y los campos. Mi alma le pertenece a ustedes, y yo les ofrezco esta vida a todos ustedes.”
Finalmente le tocó el turno a Shaym, quien no conocía la vergüenza. Él se acercó y dijo con una deslumbrante sonrisa en el rostro, “Amo a esta nación tanto como a mi ■■■■.”
Este comentario provocó un disgusto público. El Rey y la Reina casi pierden el equilibrio. Los dos hermanos de Shaym se miraron en sorpresa.
El acababa de decir en voz alta y de forma tan liberal el nombre de cierto órgano que solo poseen los hombres.
Después de la celebración, el Rey estaba furioso. Ordenó al Príncipe Shaym que en su habitación reflexionaras sobre lo que había dicho. Entonces reunió a muchos estudiosos y sabios de todo el país para discutir cómo podían educarlo.
“Su alteza, definitivamente no debe castigarle,” dijo un Gran Sabio, “Debe de haber escuchado antes la historia de las princesas y la sal. Un rey les preguntó a sus hijas lo mucho que lo amaban. La hija mayor dijo ‘Lo amo tanto como al azúcar’. La segunda hija dijo, ‘Lo amo tanto como a la miel’. Sin embargo, la hija menor dijo, ‘Lo amo tanto como a la sal’. El Rey creyó que la sal era barata y ordinaria. Por lo tanto, en un ataque de furia, él envió al exilio a la hija menor. Fueron muchos años después que la amable hija menor se casó con el rey del territorio vecino. Ella invitó a su padre a la boda, pero a propósito le dio comida sin sal...”
El Rey abrazó a la Reina. Todo su cuerpo tembló en horror. “Entiendo ahora. Si fuera a castigar a Shaym debido a esto, entonces.... ¿él cortará mi ■■■■ en el futuro?”
El Gran Sabio secretamente pensó que la lógica detrás de la historia no era tan directa, sin embargo la base no era errónea. Asintió enormemente.
El Rey pensó y pensó al respecto, volviéndose cada vez más angustiado. No podía dejar que el Príncipe Shyam deambulara libremente ni podía tratarlo con mucha severidad. ¿Qué debería hacer? Si este tipo de comportamiento continuase, ¡el Príncipe Shaym no podría encontrarse una princesa para sí!
El Gran Sabio pensó en una idea. “Los tres príncipes son jóvenes y fuertes. ¿Qué tal si los dejamos ir a una expedición con sus armas y equipaje? Por lo general, cuando los príncipes viajan, con frecuencia se llegan a encontrar princesas o damas que necesiten ser rescatada. Entonces, ¡las princesas rescatadas naturalmente estarán dispuestas a casarse con ellos! Puede usar esto también como una oportunidad para entrenarlos y volverlos príncipes aún más finos.”
El Rey estuvo de acuerdo. Al día siguiente, llamó a los tres príncipes y les hizo ir a una aventura en tierras distantes. Les dijo que salvaran al débil y castigaran al mal. Los tres príncipes estuvieron dispuestos a hacer esto. Ellos pronto empacaron sus cosas y dejaron el castillo.
No mucho después, los príncipes escucharon rumores de un malvado hechicero que vivía dentro de una gran torre en el bosque. En la torre, estaba encerrada la princesa de un reino vecino. Ella era la mujer más hermosa bajo todo el cielo. El hechicero había amenazado su reino diciendo que si no le daban a la princesa, entonces secuestraría a todas las jóvenes. La princesa tenía un buen corazón, así que estuvo dispuesta a entrar a las profundidades del bosque.
Breiv, quien no conocía el miedo, dijo, “Debemos rescatar a la princesa. Somos tres personas, definitivamente podemos derrotar al hechicero.”
Svenk, quien no conocía las dificultades, acomodó sus anteojos, “No dormí en toda la noche. Fui a conseguir información sobre el hechicero. De acuerdo a los rumores, debemos obtener tres tesoros con el fin de derrotarlo. Sin ellos, él no se rendirá.”
“No importa cuáles sean los tesoros, debemos conseguirlos,” dijo Shaym, quien no conocía la vergüenza.
De esa forma, los tres príncipes entraron al bosque. Después de experimentar una serie de dificultades, finalmente llegaron frente a la torre del malvado hechicero. Los tres príncipes se sintieron terriblemente arrepentidos ante la vista de la torre que llegaba más allá de las nubes. Todos ellos comenzaron a hacer preguntas.
“¿Por qué el hechicero vive en un lugar tan alto?” dijo Breiv, “Yo creo que debe preocuparle que otras personas husmeen en sus malévolos planes.”
“¿Cómo puede el hechicero capaz de construir una torre tan alta?”, dijo Svenk, “Yo creo que debe de tener conocimiento y la magia para hacerlo posible.”
“¿Por qué el hechicero solo quiere una princesa y no a todas las jóvenes del reino?”, finalmente habló Shaym, “Yo creo que él no debe tener un cuerpo saludable, y le falta confianza en su habilidad de ■■■■■■.”
Bajo las miradas de conmoción y censura de sus dos hermanos, Shaym no terminó su declaración. Sin embargo, estaba convencido de su punto de vista.
Los tres príncipes derribaron las puertas de la torre y continuaron avanzando. Ellos no le tuvieron miedo a ninguno de los monstruos que aparecieron repentinamente frente a ellos. Los monstruos abrieron sus sangrientas fauces. Sin embargo, estos fueron más bien los aterrados ante las valientes posturas de los príncipes, tanto que desaparecieron en una nube de humo.
Finalmente, de pronto se abrió una puerta. El hechicero estaba usando una capa negra. El se sentó en su trono, portando una sonrisa de burla en su cara.
Las impresionantes cortinas de terciopelo bordadas con hilo de oro de pronto se abrieron detrás del hechicero. En la parte trasera había una serie de barras de metal, formando lo que parecía ser una enorme jaula para pájaros. La Princesa estaba encerrada en su interior. Ella tenía una lujosa habitación, llena de ropa y adornada con joyas. Sin embargo, tenía también brazaletes en sus manos que se veían como esposas de oro. En un estilo similar, sus pies estaban sujetos. Ella era incapaz de dar un paso fuera de la jaula.
El hechicero comenzó a reír ante la desaprobación de los príncipes, “Mis héroes, no actúen precipitadamente. Incluso si fuesen a matarme, aún serian incapaces de abrir la jaula que encierra a la Princesa. Esto es debido a una maldición que ha sido impuesta en la jaula. Esta solo se abrirá cuando alguien me entregue los tres objetos que estoy buscando.”
“¿Cuales son los tres objetos?” los príncipes preguntaron al unísono.
“Primero, deben encontrar una porción de azúcar que pueda emborrachar a las personas, pero este no debe contener licor. Segundo, deben encontrar un fuego que pueda calentar a las personas, pero este no debe quemar sus manos. Tercero, deben encontrar una espada que pueda aterrar a las personas, pero esta no debe tener una hoja afilada.”
Cuando el hechicero terminó de enumerar los requisitos, él continuó, “Soy incapaz de ofrecerles alguna pista, porque incluso yo tampoco sé dónde conseguir esos objetos. Si ustedes no pueden encontrarlos, yo no puedo liberar a la princesa incluso si la liberase con mi propia voluntad.”
Los príncipes no le creyeron. Cuando se apresuraron hacia la entrada de la jaula, el hechicero ondeó sus manos y un montón de temibles secuaces aparecieron frente a los príncipes. Esta vez, los secuaces fueron muy poderosos y estos tenían garras que eran tan filosas como cuchillas. Ellos escupieron fuego para prevenir que los príncipes se acercaran demasiado.
El príncipe mayor, Briev, levantó su espada. Con un gran rugido en el nombre de su nación y Dios, heroicamente se lanzó hacia los secuaces. El segundo príncipe, Svenk, tomó esta oportunidad para evadir la pelea y se puso frente a la jaula. Él entonces sacó de su pesado saco un gran montón de libros con hechizos. Y así comenzó a probar cada hechizo en su arsenal para abrir los grilletes que descansaban sobre el cuerpo de la Princesa.
Al final, pero no menos importante, estaba el joven príncipe Shaym. Con una sonrisa en su rostro, caminó dentro de la casa y entonces comenzó a quitarse la ropa prenda por prenda.
“¡Q-qué estás haciendo!” El hechicero entró en pánico. Sus secuaces estaban demasiado preocupados en luchar con el Príncipe Mayor, así que ellos fueron incapaces de venir a protegerlo.
El príncipe mayor, Breiv, cortó la cabeza del primer secuaz. Él entonces seccionó el brazo de segundo secuaz. Los secuaces de inmediato desaparecieron en una nube de humo. Únicamente quedó un solo secuaz. La victoria de Breiv estaba al alcance de su mano.
Con sus hechizos, el segundo príncipe exitosamente le abrió los grilletes en los pies de la princesa. Él ahora estaba intentando liberar las esposas. La Princesa movió sus pies con emoción mientras se sentaba cerca de las barras de la jaula. Les brindó ánimos a los príncipes.
Para entonces, el joven príncipe Shaym ya estaba completamente desnudo. Él aplicó el excepcional cuidado a su cuerpo a través del entrenamiento en todos estos años con la milicia, atrapando así al hechicero quien fue demasiado lento para responder estando en su asiento.
El príncipe rodeó el cuello del hechicero, y lo besó apasionadamente en la boca. Enseguida inició una serie de juegos de tormento y dominación que no deben ser narrados en cuentos de hadas. El hechicero ni siquiera notó que el último secuaz había sido derrotado. Él quedó tendido lánguidamente frente al joven príncipe, como si hubiera sido golpeado por una maldición.
Después de eso, tomando sus muchos años de experiencia en quitarse la ropa, el joven príncipe le quitó la capa al hechicero. Cuando el segundo hermano finalmente fue capaz de usar sus hechizos para abrir las esposas de la Princesa, el pequeño príncipe estaba aprisionando al temeroso hechicero con su fiero y ardiente torso.
Al final, el hechicero se encontró con algo que no debe ser descrito en los cuentos de hadas y que se empujaba contra su cuerpo. Aquella parte del cuerpo, la cual no es adecuada para que aparezca en un cuento de hadas, tembló. El joven príncipe entonces habló en el oído del hechicero.
“Primero, mientras acaricié tus labios con los míos, ■■■■ y ■■■■■ tu ■■■■, en ese momento claramente no hubo intercambio de licor, y sin embargo tu cuerpo se volvió tan dócil como si estuvieras ebrio. Mi beso te hizo embriagarte al igual que una porción de azúcar sin licor. Después, comenzaste a sudar mientras mi cuerpo te ■■■■■■ y ■■■■■. Mis extremidades y músculos son el fuego que calienta a las personas sin quemarlas. Ahora, mi ■■■■ está en tu ■■■ y si yo lo ■■■■ ■■■ ■■■■■■, vas a sentir su ■■■■■■. No importa lo mucho que ruegues, no me detendré. Esto no pone en peligro tu vida, sin embargo te hace temblar. Puedes ver como mi ■■■■ es la espada que aterroriza a las personas sin tener una hoja afilada.”
Todos los secuaces habían desaparecido. Los grilletes de la princesa habían sido quitados completamente. La jaula que solía ser inquebrantable, comenzó a agrietarse. Sin embargo, no se abrió completamente.
El Príncipe Mayor había dejado a un lado su espada, y el Segundo Príncipe había puesto a un lado sus libros. Ellos ahora estaban parados a un lado de la jaula. El Joven Príncipe vio a sus hermanos antes de decir, “También hay otro aspecto. Si estamos viendo la perspectiva de todo el reino, entonces mi hermano mayor, Breiv, es un hombre que no sabe de miedo desde una edad temprana. Él es un héroe victorioso. Él es la mejor espada que puede infundir miedo a todo el país sin tener filo.”
“Mi segundo hermano, Svenk, es un hombre que nunca ha sabido de dificultades. Él siempre está investigando diligentemente, brindando conocimiento y esperanza a los demás. Él es el mejor fuego que puede darle calor a los demás sin quemarlos.”
“En cuanto a mí, soy el azúcar sin licor que puede embriagar a las personas, l igual que lo estoy haciendo contigo.”
La jaula se abrió y la Princesa obtuvo su libertad. Ella miró a los príncipes. Al principio quería ir con el Segundo Príncipe, Svenk, pero antes de llegar a él, él ya se había dirigido al estudio del Hechicero. Por lo tanto, la Princesa cambió de curso y corrió hacia el Príncipe Mayor, Breiv. Ella le rodeó la cintura con sus brazos, formando una esplendorosa escena de un riguroso caballero que rescata a una doncella.
Shaym estaba sentado en el trono del Hechicero, pero aún así no bajó su guardia después de su victoria. Él usó su embriagador azúcar para subyugar al Hechicero, su cálido fuego para aprisionarlo, y su aterradora espada para conquistarlo completamente. Por lo tanto, creó una imagen que no debe ser narrada en los cuentos de hadas.
Varios días después, los tres príncipes regresaron al castillo. El Rey y la Reina estaban conmovidos hasta las lágrimas. Ellos sintieron que sus hijos eran inmensamente sobresalientes.
Breiv, quien no sabía de miedo, recibió e cariño de la Princesa del reino vecino. Y como todos los héroes y princesas, celebraron una boda y vivieron felices para siempre. El Rey descubrió que desde el momento en que Breiv se casó, ya no actuó con impudencia. De hecho, él ahora se había convertido en una persona delicada. El Rey estaba muy feliz de ver que su hijo no solo era valiente, sino que además era una persona más tierna.
Svenk, quien no sabía de dificultades, recibió el conocimiento que era poseído por el Hechicero. Estudió este conocimiento día y noche. Cualquier problema con el que se encontrara y que no pudiera entender, él iba con el Hechicero por un consejo. Él quería extender esta mágia a los largo de las tierras y usarla por un bien mayor. El Rey y la Reina le aconsejaron que no se agotara demasiado, así que él les aseguró que descansaría apropiadamente con lo necesario para así esparcir este atractivo conocimiento por doquier. El Rey estaba muy feliz de que ya no tener que preocuparse porque su segundo hijo se enfermara por trabajar demasiado.
En cuanto al Joven Príncipe Shaym, que no conocía la vergüenza, aunque él no tenía una princesa ni libros de magia, él recibió al propio Hechicero. Al principio el Rey lo desaprobó firmemente. Después de todo, ¿cómo puede un príncipe estar con un hechicero? Sin embargo, el Rey más tarde se dio cuenta de que había cierto grado de beneficios al respecto. Desde el momento en que Shaym estuvo junto al Hechicero, él ya no se quitaba la ropa en público ni desnudaba a los demás ante todos. Tanto el Rey como la Reina estuvieron agradablemente sorprendidos al ver que su hijo menor por fin había conseguido tener un sentido el honor.
Sin embargo, la situación no era como parecía. Shaym solo había aprendido a tener un sentido de privacidad. En realidad, él solo tenía juegos desvergonzados con el Hechicero dentro de su propia habitación en el castillo. Por ello, él fue capaz de tener una feliz vida sexual para siempre.
- FIN –
Nota del autor: .... Después de escribir esto, también me siento bastante desvergonzado …………………… _(:з」∠)_
Traducción al español: Siboney69
Traducción al inglés: Snowy Codex
Nota extra:
1) Los nombres originales de los príncipes son 布瑞夫 (Bù Ruì Fū), 斯溫克 (Sī Wēn Kè) y 歇姆 (Xiē Mǔ). Pero en lugar del pinyin preferí mantener la versión en inglés:
Breiv = Brave = “Valiente”
Svenk = Swink = Entre sus diversos significados están ‘labor, esfuerzo’ ‘’trabajar arduamente’
Shaym = Shame = Vergüenza
2) Aclaro que las partes censuradas no fueron hechas por mí, así es la versión original y no quise cambiar eso. Además, en el párrafo con muchas palabras omitidas tuve dificultades porque lo hice en base a mi imaginación, ‘adivinando’ lo faltante, por ello tengan en cuenta que pueden haber errores... (Aclaro que las palabras están en pasado y conté las letras, espero eso ayude xD)
Nota personal: Se supone que esto sería un regalo por el 14 de feb., pero llegó el día y yo aún no lo tenía listo, así que tuve que cambiarlo al ‘Día blanco’.
No tengo más por decirles, espero que disfrutaran de esta pequeña historia. ♥
ResponderBorrar“Primero, deben encontrar una porción de azúcar que pueda emborrachar a las personas, pero este no debe contener licor. Segundo, deben encontrar un fuego que pueda calentar a las personas, pero este no debe quemar sus manos. Tercero, deben encontrar una espada que pueda aterrar a las personas, pero esta no debe tener una hoja afilada.” Con tan dolo ese párrafo estaba mas que claro que sería el joven príncipe... Nota para el autor... Si debería ser descrito en cuentos de hadas... La mayoría somos Hadas Fujoshi...😋😂
me encanto... muchas gracias
ResponderBorrarMuy bueno! Gracias por la traduccion
ResponderBorrarMe gusto mucho, lastima que no describan esas cosas, fue divertido de leer. Muchas gracias,
ResponderBorrarYo pense que la respuesta era el amor XD
ResponderBorrarCuando estas enamorado la persona tiende a volverse algo tonta y no pensar mucho. En si, derretirse por la persona de la que esta enamorada.
El fuego pensaba en la calidez que te puede causar ese sentimiento o la dicha de tener a esa persona.
El tercero haciendo referencia que el amor es hermoso sin emebargo puede volverse en tu contra, algo asi como una espada de doble filo.
Jajaja pero bueno,gracias por la traduccion.