viernes, 7 de octubre de 2022

[Demonio a la venta] Capítulo 21


Miras la parte inferior de tu cuerpo, tus genitales dentro del pantalón están hinchados y arden, en parte porque los ojos de Remiel siguen enfocados en ti. Es una cortesía básica mirar a alguien a los ojos cuando se habla. Tragas saliva e intentas mirarle pero tan pronto como le ves desaparecen todas las palabras que habías organizado.

Remiel también te mira, los dos se ven el uno al otro, bum, tu sangre fluye nuevamente de vuelta a tu cabeza. Al ver su rostro, recuerdas el sueño de hace un momento, recuerdas cómo tu mano rodeó sus caderas y entró en la cavidad corporal.

En el sueño, el rostro de Remiel era borroso. Nunca has visto su cara durante el sexo, y naturalmente no puedes imaginarla en el sueño. Pero su cuerpo es incomparablemente distintivo, la piel es cálida y elástica, el túnel apretado y ardiente, todo era sumamente realista, obviamente aún recuerdas cómo se siente. Antes de que supieras que Remiel es Remiel, lo violaste. Los recuerdos del pecado siguen enterrados en tu corazón, y a pesar de que ya te has arrepentido profundamente, aún no desaparecen.

Tienes un impetuoso sentido de disculpa, tienes un profundo sentido de culpa, y además de eso, también un pánico que casi lo consume todo. Te preguntas que pensará de ti. Temes que se muestre incómodo, temes que se sienta asqueado, o peor aún, asustado. Ahora todo parece ir muy bien, te habla, te mira a los ojos, comen juntos, algunas veces están lo suficientemente cerca como para sentir el calor del otro, él acepta tu presencia y también se le nota relajado. Esto es muy distinto a domesticarlo con cadenas. No quieres que malinterprete, no quieres regresar en el tiempo.

—¡No lo volveré a hacer! —dices apresurado—. Solía pensar en ti como un demonio, pero tú… pero tú no lo eres… No lo volveré hacer, soy sacerdote.

—Eres sacerdote —repite Remiel, elevando las cejas e incluso riendo—. ¿Los sacerdotes tienen reglas que digan algo como “no follarás demonios”?

—La copulación con demonios no está prohibida, ya que no son hombres ni mujeres, ni humanos ni bestias —explicas, prometiendo una vez más—. Tú no eres un demonio, eres un hombre. Nunca tendré relaciones con un hombre o nos mancharemos ambos.

La sonrisa de Remiel desaparece lentamente.

—¿Quieres decir que no me follaras porque soy hombre? —dice.

Es precisamente eso, dado que defines a Remiel como un ser humano, ya no lo violarás. Pero él está en lo correcto, así que tú sigues y sigues.

—Sí —respondes— “No tendrás relaciones con un hombre como se hace con una mujer: esto es una cosa bominable.

—¿Qué es eso? ¿una escritura? —pregunta.

—Levítico —respondes—. “No se manchen haciendo estas cosas, porque con ellas se han manchado las naciones que yo desalojé ante ustedes. El país estaba manchado, por lo que yo fui a pedirles cuentas; y la tierra echó fuera a sus habitantes. Ustedes guarden mis leyes y mis normas y no cometan ninguna de estas abominaciones ni tampoco los forasteros que vivan entre ustedes. No cometan estos mismos pecados para que la tierra no los aloje fuera, del mismo modo que vomitó las naciones anteriores a ustedes que cometieron todos estos pecados. El que cometa estos pecados, todas las personas que los cometan, serán eliminados de su pueblo.

Recitas de corrido un largo pasaje de las santas escrituras. Cuando estás nervioso, recitar puede devolverte el orden. Con las escrituras, hay reglas, si sigues las escrituras no cometerás errores; Dios te bendiga.

Pero a diferencia de los viejos tiempos, no te sientes completamente tranquilo. No queda expresión alguna en el rostro de Remiel, su sonrisa parece como la nieve ante el sol, en algún punto se ha derretido sin dejar rastro. No puedes leer sus emociones, es como una caja que se ha cerrado de golpe.

Una vez que te detienes, la habitación queda en un silencio aterrador. Te hace temblar de miedo, como si vieras algo deslizarse por una pendiente, si no tiras de vuelta habrán terribles consecuencias. No puedes parar, tienes que usar tus habilidades de clérigo (es lo único en lo que eres bueno) y asegurarle que el error que cometiste en el pasado nunca se volverá a repetir. Sabes que ha notado algo mal en ti. A decir verdad, eres un poco distinto a las personas comunes, pero eres un sacerdote que sigue las enseñanzas católicas, definitivamente no cometerás ninguno de los males que el Señor prohíbe. Quieres transmitirle esto y prometérselo para que esté tranquilo.

Remiel te interrumpe cuando comienzas a hablar sobre la parte de Sodoma y Gomorra siendo destruida por su lujuria rebelde.

—Padre —dice—, ¿sabes cuantas veces me has follado? Me follaste todos los días como si fuera una maldita máquina de ejercicios aeróbicos, ¿y acaso la ciudad fue destruida?

La voz de Remiel se vuelve cada vez más fuerte, hasta que al final está gritando. Aprieta los dientes y los puños como si intentara reprimir su ira.

No te preocupa que esté enfadado, al final de cuentas, le hiciste algo malo y él tiene todo el derecho de estar furioso contigo. Si te golpea, no te defenderás; incluso esperas que comience a golpearte para que se tranquilice. Entonces, ambos podrán seguir delante y actuar como si este episodio nunca hubiese ocurrido.

—En ese entonces creía erróneamente que eras un demonio, pero Dios es misericordioso, me perdonó por los pecados que yo mismo no sabía haber cometido —dices—. Lo siento mucho, lamento todo profundamente.

Remiel se ríe, parece sentir que esto es bastante absurdo. Estalla en carcajadas agudas pero la expresión de sonrisa no aparece en su rostro, mucho menos en sus ojos; cuando sonríe sinceramente, sus cejas y ojos se curvan, y aparecen unas sutiles líneas de expresión alrededor de sus ojos. Cuando está feliz, esta no es la forma en la que ríe.

De pronto se abalanza sobre ti, no te resistes, en tu corazón esperabas esto. Remiel te levanta del cuello de la camisa y te arroja sobre el sofá. Se monta sobre ti, esperas a que llegue el puño pero no sucede.

Remiel desabrocha tu cinturón, lo saca, lo tira a un lado y comienza a maniobrar con tu pantalón. Sus dedos tiemblan, y él se encuentra tan furioso que sus movimientos son torpes.

—¿Qué haces? —preguntas.

—Has dicho que ahora soy un hombre para ti, ¿o no? —dice Remiel.

Enseguida entiendes lo que quiere hacer pero no tienes idea de por qué quiere hacerlo. Remiel tiene muchas formas de vengarse, pero esta también lo manchará a él, este método definitivamente no es el mejor. Se lo señalas e intentas persuadirlo pero él no te escucha. Tira desesperadamente de tu pantalón pero sus manos temblorosas y tu resistencia le hace imposible quitártelo, así que los rasga.

No tienes más opción que usar una plegaria. Tu estado anímico no es estable y el efecto de la plegaria es ligeramente mayor a lo esperado por lo que él es lanzado lejos de tu cuerpo. Cae del sofá y tú te levantas, subes la cremallera del pantalón y le tiendes la mano a Remiel, intentando incorporarlo, pero él te agarra intentando tirarte al piso. De nuevo recitas una plegaria.

La mano de Remiel se escurre hacia abajo, y él se queda tendido e inmóvil en el suelo. Sientes que necesita tiempo para tranquilizarse al igual que tú. Vas al baño y te lavas la cara con agua fría; el calor y el mareo del alcohol, así como el sueño, han desaparecido por completo, el culpable en tu pantalón también se ha tranquilizado. No quedan rastros.

La segunda plegaria fue mesurada, solo lo dejó paralizado por diez segundos. TE quedas parado en el baño unos cuantos minutos esperando que una vez que salgas él ya esté tranquilo, entonces podrás intentar tener una charla tranquila. Sin embargo, cuando vuelves a la sala, Remiel sigue tendido en el piso, acurrucado y cubriéndose el rostro.

Cuando te acercas, escuchas sus sollozos reprimidos.

Está llorando.

Nunca lo has visto llorar, ni siquiera cuando lo vendieron cubierto de lesiones, ni cuando le vertiste agua bendita o cuando tenía el arma en la boca para matarse. Cuando tiene la voluntad de vivir persevera apretando los dientes, cuando busca la muerte no se anda con tonterías; simplemente no te era posible imaginártelo llorando. ¿Qué ha pasado? ¿qué hiciste mal? ¿por qué está llorando? Estás aterrado, te medio arrodillas a su lado. No te atreves a tocarlo a pesar de querer hacerlo. Estás perdido, tanto así que tropiezas con las palabras que usas para persuadir a los creyentes.

—¿Estás bien? —dices— ¿Necesitas ayuda?

A tan solo unos segundos de escucharte, Remiel se envuelve aun más como si quisiera desaparecer de tu vista. Poco después, parece darse cuenta de algo. Suelta la mano que cubre su rostro, las esquinas de sus ojos y la punta de su nariz están rojas, las lágrimas siguen húmedas en su cara pero él te ve como un jarro de agua roto, ni siquiera se molesta en secarlas. Casi te estremeces ante esto, tu cuero cabelludo hormiguea.

Remiel sigue llorando.

—Soy gay —dice.

—¡Fuiste forzado! —sueltas, ansioso por exonerarlo—. Te forzaron, no era tu intención…

—Siempre he sido gay —te interrumpe, aún sollozando pero sorprendentemente tranquilo—. Cuando tenía catorce o quince me di cuenta de que no quería pasar toda mi vida con una mujer.

Tú no hablas.

—He tenido novios, más de uno. Salimos juntos y terminamos, no por alguna razón trascendental sino más bien porque simplemente no congeniamos —continúa—. Me fui a la cama con cada uno de ellos porque…. porque mi corazón y mi pene así lo quisieron. Por voluntad propia chupé penes, follé y también me han follado. Hago más de esto último porque me gusta. Si me enamoro de alguien, quiero hacer el amor con esa persona.

Se atraganta y tiembla ligeramente, por un momento parece no poder continuar. Tú quieres levantarlo pero él te ignora y se limpia el rostro con fuerza.

—Así que, Padre…—dice Remiel en voz baja—. ¿Soy una perra asquerosa? ¿merezco irme al infierno?

Tú respondes:
A: …. (Clic)

B: Mientras te arrepientas con sinceridad, Dios salvará tu alma. (Clic)


*

Traducción al español: Siboney69
Traducción al inglés: PastTimer [Wattpad]

Notas de traducción:
-Levítico: “El Levítico (en griego: Λευιτικός, Leyitikós, ‘acerca de los Levitas’; en hebreo: ויקרא [Vayikra], ‘y Él llamó’) es uno de los libros bíblicos del Antiguo Testamento y del Tanaj. […] Las instrucciones del Levítico hacen hincapié en las prácticas rituales, legales y morales más que en las creencias. Sin embargo, reflejan la visión del mundo del relato de la creación en Génesis 1, según la cual Dios desea vivir con los humanos. El libro enseña que el fiel cumplimiento de los rituales del santuario puede hacerlo posible, siempre que el pueblo evite el pecado y la impureza siempre que sea posible. Los rituales, especialmente las ofrendas por el pecado y la culpa, proporcionan los medios para obtener el perdón de los pecados (Levítico 4-5) y la purificación de las impurezas (Levítico 11-16) para que Dios pueda seguir viviendo en el Tabernáculo en medio del pueblo.” [Fuente: Wikipedia]
[+Sobre la cita: Aclaro que en lugar de hacer una traducción del texto en inglés, me fui por la vía fácil de copy+paste el texto tomado de la biblia más cercana. Si quieren buscar el fragmento mencionado es Lev. 18:19 a 18:29 –salvo algunas líneas no incluidas-].

-Sodoma y Gomorra: “(del hebraico סְדוֹם Sodom y עֲמוֹרָה Amorah), según la Biblia, fueron dos ciudades destruidas por Dios con fuego y azufre caídos del Cielo, por sus pecados. […]Sodoma y Gomorra se mencionan en el Génesis, después de que Abraham regresara de Egipto. Los habitantes de ambas ciudades son descritos como grandes pecadores contra Dios. Sin embargo, eso no impidió una coexistencia pacífica entre los habitantes de Sodoma con Abraham ni con su sobrino, Lot.
Algunos escritos judaicos clásicos enfatizan los aspectos de crueldad y falta de hospitalidad con los forasteros. Una tradición rabínica, expuesta en la Mishnah, afirma que los pecados de Sodoma estaban relacionados con la ganancia y el apego excesivo a la propiedad y las riquezas; y que son interpretados como señales de falta de compasión. […]
Los textos proféticos, como el Libro de Ezequiel, (16:49), explica que Sodoma y Gomorra fueron destruidas por su orgullo, su descuido y no haber ayudado a los pobres y a los infelices.8 En el Evangelio de Mateo (11:23) Jesucristo menciona que ambas ciudades fueron diezmadas por su falta de hospitalidad.
” [Fuente: Wikipedia] [Nota: Les recomiendo leer la entrada en inglés de la Wiki porque incluye más datos interesantes]

- Arrepentimiento: “El arrepentimiento es el pesar que una persona siente por algo que ha hecho, dicho o dejado de hacer. Quien se arrepiente cambia de opinión o deja de ser consecuente con un determinado compromiso.
El término arrepentimiento designa una voluntad personal y sincera de asumir responsablemente las consecuencias de actos considerados moralmente reprobables cometidos en el pasado y de comprometerse a no perpetuarlos.
[...]
En la teología judeocristiana el equivalente al término arrepentimiento es traducido del Hebreo "(תשובה)", que significa literalmente “volver” o "volverse". Así mismo, literalmente significa dejar el pecado atrás, dejar de pecar, rechazar la maldad, para volverse al camino de Dios y guardar sus mandamientos, volverse lejos de la maldad y la mentira, hacia la santidad y la verdad. Implica volver a la Ley moral de Dios, aunque esto llega a tener diferentes interpretaciones: desde un punto de vista más judaico, significa volver del mal camino para guardar los mandamientos de la Ley Mosáica y los estatutos del Antiguo Pacto, mientras que desde el punto de vista mesiánico y cristiano, implica volverse del camino del pecado para guardar los mandamientos y enseñanzas de Jesucristo, en el evangelio o Nuevo Pacto.
[...]
Arrepentimiento y remordimiento suelen parecerse y confundirse, generalmente se considera que no son lo mismo. Se pueden ejemplificar en las actitudes de Judas Iscariote y de Pedro respecto a la entrega que hizo de Jesús. [...] La diferencia radica en que en el remordimiento de conciencia, como en el de Judas, sucede cuando el individuo se siente mal por lo que hizo, pero el sentirse mal por sí solo, no es algo que pueda lograr un cambio de vida, ni un acercamiento con Dios. En contraste, en el arrepentimiento genuino y verdadero, por un lado, comparte el pesar que viene del remordimiento, reflejado en el hecho de que la persona se siente mal por lo que hizo, pero además pide perdón por las ofensas y los pecados cometidos mediante el lloro, lamentación y/o clamor hacia Dios, y sobre todo, se vuelve de un camino en el que se es guiado por Dios espiritualmente, en obras y en vida, logrando un cambio verdadero de mente y actitud respecto al pasado.
” [Fuente: Wikipedia]

Comentario personal: Cuando leí la parte del Levítico me acordé de un libro que leí hace tiempo y se llama “Este libro es gay” de James Dawson. En sí son datos y respuestas del autor sobre lo que significa ser parte del colectivo LGBT* y ahí hay una pequeña sección que habla sobre religión. Me parece muy interesante (y pertinente para este capítulo) y por eso lo incluyo a continuación.

La mayoría de los creyentes ve sus libros sagrados como una guía general para la vida, una guía moral, si se prefiere. El problema surge cuando una minoría toma al pie de la letra lo que hay escrito… y, para empeorar las cosas, posiblemente se haya interpretado mal el significado de algunas de esas palabras. Los relatos y poemas sagrados fueron escritos por humanos hace cientos de años y puede haber errores o añadidos en las traducciones. Es como jugar al juego de los disparates (o del teléfono) durante siglos: es inevitable que algunas cosas se pierden por el camino.
[…]
2. Cristianismo
Como sabéis, hay varias ramas del cristianismo y cada una tiene un punto de vista diferente sobre la homosexualidad. He aquí un resumen muy esquemático:
Iglesia de Inglaterra (anglicanismo): progresista pero resistente. El matrimonio homosexual está bien para los tipos normales, pero no para los sacerdotes.
Iglesia católica: la homosexualidad se considera un pecado.
Iglesia metodista: relativamente avanzada.
Cuáqueros: superguays. Hace años que lo son.
Baptistas: me temo que tienen problemas graves con los gais.

¿Y cuál es el gran problema? Que todo es una cuestión de TRADUCCIÓN y LENGUAJE. Hay muchísimas traducciones de la Biblia (el libro sagrado de los judíos y los cristianos) y todas son ligeramente distintas. Una palabra perdida aquí o allá desprestigia la homosexualidad. El problema procede de dos puntos clave de la Biblia. Las citas siguientes son de la traducción de Casiodoro de Reina y Cipriano de Valera (Y lo he escrito en una fuente siniestra):
«[LOS HOMBRES DE SODOMA] LLAMARON A LOT Y LE DIJERON: “¿DÓNDE ESTÁN LOS VARONES QUE VINIERON A TI ESTA NOCHE? TRÁELOS PARA QUE LOS CONOZCAMOS”.»   Génesis 19,5. (Dicen que «conocer» significa aquí «follar».)

«COMO SODOMA Y GOMORRA, Y LAS CIUDADES VECINAS, A SEMEJANZA DE AQUELLAS HABÍAN FORNICADO Y HABÍAN SEGUIDO LA CARNE EXTRAÑA, FUERON PUESTAS POR EJEMPLO, SUFRIENDO EL JUICIO DEL CASTIGO ETERNO.»   Judas 1,7. (Dicen que «seguir la carne extraña» significa «practicar la homosexualidad».)

Entonces ¿qué está pasando aquí? En pocas palabras, las ciudades de Sodoma y Gomorra estaban en el valle del Jordán hasta que Dios decidió arrasarlas con el fuego celestial. Suena como un episodio alucinante de Buffy Cazavampiros hasta que te das cuenta de que la gente utiliza esta historia para perseguir a otra gente.
Según algunas lecturas del texto hebreo (versiones de esta historia aparecen en la Torá, la Biblia y el Corán), se cree que la conducta que tanto ofendía a Dios fue la homosexualidad.
Esto está ABIERTO a toda clase de interpretaciones, como pronto veremos.

Más advertencias acojonantes procedentes de la Biblia:
«NO YACERÁS CON HOMBRE COMO CON MUJER; ES ABOMINACIÓN.» (Levítico 18,22).
«SI ALGUIEN SE ACOSTARA CON VARÓN COMO CON UNA MUJER, AMBOS HABRÍAN COMETIDO ABOMINACIÓN; AMBOS DEBERÁN MORIR Y SOBRE ELLOS PESARÁ LA SANGRE DERRAMADA.» (Levítico 20,13).  
Aquí se pasan, ¿no?

COMO DISCUTIR CON UN CRISTIANO
❖ ¡SI TE SALEN CON QUE «ESTÁ ESCRITO EN LA BIBLIA!

Hablemos de traducciones. La Biblia ha sido traducida e interpretada muchísimas veces. No podemos estar completamente seguros de lo que decía la versión original, así que es absurdo entenderla literalmente. Esto pasa también con todo texto traducido o interpretado. Incluso las versiones modernas de la Biblia difieren entre sí, de modo que, ¿cómo puede tomarse al pie de la letra?
Hay que tener en cuenta que el texto fue escrito hace miles de años, y los tiempos han cambiado. Los mensajes todavía pueden aplicarse hasta cierto punto, pero tenemos que adaptarlos a la vida moderna. También hay que señalar que TODAS las citas mencionadas más arriba están fuera de contexto y, al fin y al cabo, se trata de historias y anécdotas, no de leyes (incluso san Pablo lo entendió así).
Los contextos cambian. La Biblia habla repetidamente de perseguir a los recaudadores de impuestos... que en aquella época eran corruptos. Pero seguro que no has oído hablar de cristianos que vayan persiguiendo con antorchas encendidas a los empleados de Hacienda, ¿a que no?
Además, oh amantes de las mujeres, como todo el problema viene de la «sodomía, ¡las lesbianas se libran del pecado! ¡Hurra!
Por último, en el Nuevo Testamento, que se basa en las enseñanzas de Jesús, éste no dice nada concreto sobre el tema. Por lo que sabemos, Jesús no predicó otra cosa que amor y tolerancia. Personalmente, creo que Jesús, si viviera en la actualidad, estaría en todas las manifestaciones del Orgullo Gay.

COMO DISCUTIR SOBRE EL ASUNTO DE SODOMA Y GOMORRA
En primer lugar, la expresión conocer (del hebreo) muy pocas veces significa follar. En este caso es más probable que signifique interrogar. En segundo lugar, se cree que carne extraña se refiere a la de los ángeles o posiblemente a la zoofilia. En cualquier caso, muchos estudiosos de la Biblia están de acuerdo en que las ciudades fueron destruidas sobre todo por su codicia y por su naturaleza poco caritativa. No hay ninguna referencia EXPLÍCITA a la homosexualidad.

COMO DISCUTIR SOBRE EL ASUNTO DEL LEVÍTICO
Vale, reconozco que este pasaje dice las cosas más claramente, pero OJO (y no me refiero a ese OJO,je,je): el Levítico pretende ser una lista de instrucciones de Moisés a los levitas y, sí, una de las normas era la ya mencionada. Pero por suerte para nosotros, el resto de la lista es UNA PASADA. Así que cualquiera que te arroje a la cara un pasaje del Levítico debería estar dispuesto también a:
Vender a su hija como esclava.
No tener contacto físico con una mujer que tenga la regla.
Quemar toros.
No comer marisco (otra abominación, así que CUIDADO CON LAS GAMBAS).
No cortarse nunca el pelo de la cabeza. Prohibido.
Así que, como podéis ver, tendríais que ser unos hipócritas redomados para utilizar este libro como argumento contra la homosexualidad.

AHORA UN GOLPE DE EFECTO QUE TAL VEZ NO HAYAS VISTO VENIR
Hay indicios más que convincentes de amor homosexual en la Biblia casi tres mil años antes de la serie de televisión Queer as Folk. Así es. En el segundo libro de Samuel, los superamigos David y Jonatán debían ser algo más que amigos. Mira, mira:
«ANGUSTIA TENGO POR TI, JONATÁN, HERMANO MÍO, QUE ME FUISTE MUY DULCE. MÁS MARAVILLOSO ME FUE TU AMOR QUE EL AMOR DE LAS MUJERES.» 2 Samuel 1,26. (¡Toooma!)
También las chicas se subían al tren del tórrido amor bíblico. La historia de Ruth y Noemí parece un episodio de Mujeres desesperadas a lo loco (hay mucho intercambio de marido), pero algunos estudiosos leen su aventura como un caso de amor homosexual.
Por último, hay varias partes de la Biblia que se han perdido muy oportunamente (como el Evangelio de María), así que, como siempre, no debemos confiar ciegamente en unas fuentes de información tan antiguas.


*
Me gustaría comentar más cosas sobre esto del Levítico, S&G, etc., pero no soy experta y de tan solo pensar en el tema me pone de malas (¬w¬).

Cambiando de tema…. ya tengo hecho el siguiente capítulo, solo es cosa de verificar con el texto chino y corregir en general. Espero publicarlo pronto.

Por sus visitas y lectura, gracias.

1 comentario:

  1. Esperaba mucho este capítulo pero no me esperaba esto... Ni del sacerdote ni del demonio. No sé qué pensar. Jaja.

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