domingo, 15 de septiembre de 2019

[¡El guión no es así!] Capítulo 4: El llamado fulano secundario

Capítulo 4: El llamado fulano secundario
Desde ese día, Xiao Han pronto se adaptó a su increíblemente genial nueva identidad.

¿Nunca antes habías sido emperador? No importa, para eso está el guión.

¿No sabes cómo marcar los procedimiento para el trono? No importa, para eso está el guión.

¿No sabes cómo gobernar el país, o manejar los juegos mentales de política, o expandir el territorio, o equilibrar los poderes de la corte imperial? ¡Nada de eso importa! ¡Todo estará bien siempre y cuando sepas como enamorarte!

Como estudiantes, alguna vez todos han tenido fantasías sobre poseer a su propio Doraemon y con él usar todo tipo de increíbles accesorios para meter directamente en sus cerebros cualquier información necesaria. Pues Xiao Han no era la excepción. Sin embargo, aunque de alguna forma parecía haberse dado cuenta de este deseo infantil, lo cierto es que no podía sentirse feliz al respecto.

Así pues, a los ojos de ministros, eunucos y concubinas, el caprichoso temperamento del Emperador Qing empeoró e incluso se volvió más desalentador que nunca.

Con el tiempo, comenzó a nevar y el palacio pareció cubierto en plata.

Xianfu trotó cargando una lámpara en la mano, se detuvo frente al Palacio Changqing y se arregló la ropa antes de entrar lentamente. Las altas puertas de madera lacadas en rojo mantenían alejado el viento y la nieve.

Entró, se inclinó, y vio al Emperador Qing recostado en un sofá hecho de madera de peral, el cual estaba cubierto con una cálida y gruesa piel de tigre blanco. A su lado, el calentador ardía vigorosamente. La vasija de celadón, colocada sobre el altar de inciensos, contenía unos cuantos tallos de flores de ciruelo, enviados ayer por el Asistente de Ministro Zhuo, perteneciente al Ministerio de Ritos.

Al escuchar el sonido de los pasos, el Emperador Qing lentamente abrió los ojos. Xianfu se acerco rápidamente con el té caliente.

—Afuera está nevando mucho —dijo Xianfu en voz baja mientras observaba su expresión en secreto— Su Majestad, debe tener cuidado de no resfriarse durmiendo así.

De forma perezosa, el Emperador Qing se levantó del sofá. Su capa, hecha de piel de zorro, se deslizó por sus hombros, revelando una túnica negra ajustada a la perfección con finos bordados dorados. Sus hombros anchos y cintura estrecha le hacían parecer aún más alto y guapo.

—¿De nuevo está nevando?— A pesar de hacer esta pregunta, Xiao Han no miró hacia la ventana. En cambio, sus ojos se posaron sobre las flores de ciruelo en el florero. Las flores ya se estaban marchitando a pesar de que solo había pasado un día.

—Sí, Su majestad.— Xianfu notó la línea de visión del Emperador Qing y agregó apresurado— Hace un momento este humilde sirviente se encontró con el Asistente de Ministro Zhuo, mismo que le dijo a este sirviente que si las flores del ciruelo se habían marchitado, le gustaría elegir algunas flores frescas para que Su majestad las disfrute.

Recientemente, Zhuo Fan fue nombrado Asistente de Ministro de Ritos y aunque nadie en la corte se atrevió a decir algo directamente, los rumores volaron por todo el palacio. En la oscuridad, todos chismorreaban acerca de cómo Zhuo Fan debió de haber logrado su posición tan fácilmente: subiéndose a la cama imperial y sirviendo al emperador con su cuerpo.

Aunque las palabras sonaban mal, lo cierto es que decían la verdad.

Zhuo Fan era reservado y distante por naturaleza. Ahora, dado su rápido ascenso en la corte debido a la gracia del emperador, la corte estaba llena de resentimiento, volviéndolo impopular entre los funcionarios. A excepción de aquellos aduladores que le besarían el trasero a cualquiera en favor del emperador, la única persona un tanto cercana a él era Shao Ze, quien también tomó los exámenes imperiales junto con Zhuo Fan y en cambio ocupó el tercer lugar con sus resultados. Por una parte, Zhuo Fan era desdeñoso de interactuar con aduladores y por otra, a pesar de su vínculo como compañeros de estudio, Shao Ze siempre había despreciado los sugestivos enredos que tenía con el Emperador Qing. Shao Ze siempre se posesionaba en contra de su terrible enamoramiento y le instaba a que rompiera su enlace clandestino con el emperador. Pero naturalmente, tales comentarios hicieron enojar a Zhuo Fan, y le volvieron reacio a hablar nuevamente con él. Como resultado, al final, Zhuo Fan permaneció solo en la corte, día tras día.

Pero hace poco tiempo las cosas comenzaron a cambiar: Wen Muyan, hijo y sucesor del príncipe Wen, había regresado a la capital para recibir el otorgamiento formal de su posición y las bendiciones del Emperador Qing.

Al pensar en ello, por dentro Xiao Han rió con frialdad mientras que sus ojos eran gentiles. Las yemas de sus dedos rozaron los suaves pétalos rojos de las flores del ciruelo, como si acariciaran la mejilla de un amante.

—¿Cómo podría su delgado y frágil cuerpo soportar tanta nieve? Llámalo para que entre.

Xianfu se fue ante su orden.

Después de que las puertas fueron cerradas, Xiao Han agitó sus mangas y arrojó las flores rojas, regándolas por todo el suelo. Solo quedaron unos pocos pétalos en las ramas, parecían solitarios y lamentables.

Zhuo Fan llegó con gran rapidez.

A decir verdad, al día siguiente después de aquella noche, fue asignar como Asistente de Ministro de Ritos. Y justo cuando su nuevo rango le llenó de orgullo y esperanza, el Emperador Qing parecía lentamente estar perdiendo el interés en él. El emperador ya no le otorgaba su favor todas las noches. A pesar de que de vez en cuando recibía un poco de calor y afecto, parecía más como un pequeño gatito o un perro ante los pies del Emperador Qing: se le otorgaba una mirada o un juguetón abrazo cada que se le antojaba al emperador pero a la vez era ignorado por completo en cuanto este se giraba.

Las personas enamoradas siempre están sujetas a padecer un coeficiente intelectual negativo. Cualquiera podía ver que Zhuo Fan estaba cayendo en desgracia, pero aún así él se aferraba a una minúsculo rastro de esperanza. La ardiente ansiedad e incertidumbre le atormentaba todos los días. Sin embargo, el Emperador Qing le llamó cada vez menos, mientras que cada vez más bellezas comenzaron a aparecer en el palacio. Finalmente, al ver que estaba a punto de convertirse en uno de los innumerables amantes abandonados por el Emperador Qing, Zhuo Fan no pudo contenerse más.

—Este humilde súbdito ofrece sus respetuosos saludos a Su majestad. ¡Larga vida a Su majestad!

Xiao Han se giró e indiferente le echó un vistazo al Asistente de Ministro de Ritos arrodillado ante él. Hoy Zhuo Fan ni siquiera se cubrió con un abrigo, sus hombros estaban repletos de nieve. Quizás debido a que había estado parado bajo la nieve durante largo tiempo, su rostro se había palidecido con el frío y su nariz estaba un poco rojiza, por otra parte, sus ojos estaban llenos de tristeza y amargura, el largo y oscuro cabello colgaba suelto y se aferraba a su espalda como seda, haciendo que su cuerpo se viera aún más frágil y lamentable.

—Levántate— escupió Xiao Han con indiferencia. Arrugó las cejas con ligera burla. Realmente no podía entender las extrañas preferencias del guión. A pesar de ser un pilar de la nación, este hombre no servía a la corte. En cambio, pasaba sus días deprimido, pensando todo el día en ninguna otra cosa que el número en aumento de las personas que habían recibido el favor del emperador. ¿Qué tiene de fascinante semejante cobarde?

¿Te crees que estás actuando en Las Emperatrices en el Palacio?

—Su Majestad, estas flo...— En sus brazos, Zhuo Fan llevaba algunas ramas recién recogidas de flores de ciruela, sin embargo, cuando levantó la mirada, vio que el jarrón de celadón estaba lleno con tallos de clivias en flor.

Siguiendo su mirada, Xiao Han miró las clivias en el florero y sonrió significativamente.

—Los envió Mo Lan hace un momento, —dijo el emperador con voz indiferente— vi que las flores de ciruelo se habían marchitado y pedí que las cambiaran. Qué apaciguador para el espíritu tener pétalos esparcidos por todo el piso.

Al escuchar el nombre de Mo Lan, tembló el corazón de Zhuo Fan. ¿No era este el hombre que acababa de entrar al palacio? ¿Se había ganado el favor del Emperador Qing en tan solo dos días?

—Así que a Su majestad no le gustan las flores de ciruelo. Parece que este humilde súbdito ha hecho algo innecesario...— Zhuo Fan apretó fuertemente las ramas contra su pecho y su ardiente corazón lentamente se enfrió. Deseó que el Emperador Qing le hablara un poco más, pero este no dijo nada.

Entonces... entonces, había sido un tonto de principio a fin, dándose aires de importancia…

Xiao Han no sintió nada al ver lo perdido que estaba Zhuo Fan. Aunque no tenía intención de hacerle daño, tampoco pretendía amarle.

—¿Tiene algo más que informar mi querido sirviente— con indiferencia, Xiao Han simplemente repitió las líneas del guión— Si no hay nada más, puedes retirarte.

Zhuo Fan parecía querer decir algo. Sin embargo, desafortunadamente la voz de Xianfu llegó desde el otro lado de la puerta.

—Su majestad, Mo Lan está afuera solicitando verle.

—Hazlo entrar— Xiao Han ya no podría molestarse con Zhuo Fan, regresó al suave sofá y cerró los ojos.

Sin comprender, Zhuo Fan permaneció fijo en el lugar. La razón le decía que debía abandonar este frío palacio lo antes posible pero el sonido de Mo Lan abriendo las puertas, así como sus ligeros pasos, parecían haber clavado a Zhuo Fan en el suelo. No podía moverse.

Mo Lan era un joven hermoso, con una apariencia bastante refinada así como un agudo sentido de la sensibilidad. Giró la cabeza para sonreír hermosamente a Zhuo Fan, pero su sonrisa estaba llena de burla.

—Mo Lan presenta sus respetos a Su majestad. Después de escuchar del Eunuco Xian que Su majestad ha estado trabajando arduamente, este humilde sirviente ha preparado especialmente unas gachas con hongos de nieve para Su majestad. Por favor disfrutelas.

Aunque Mo Lan tampoco era del tipo de Xiao Han, aún así fue un poco sensato. Le llamó con la mano y de inmediato el joven se movió ágilmente hasta su lado y comenzó a servirle las gachas, soplando sugestivamente cada cucharada antes de ofrecercela.

—¿Qué piensa Su majestad?— Mo Lan acarició el pecho del emperador con un toque adulador, dibujando círculos suavemente con las yemas de los dedos.

—No está mal.

Al recibir tal afirmación, Mo Lan se rió con alegría, como un perrito moviendo la cola con orgullo.

Siendo olvidado e ignorado, Zhuo Fan observó el intercambio afectuoso entre los dos y sintió como si hubiera caído en una cueva de hielo. No sabía cómo finalmente abandonó el Palacio Changqing. Ahora, la nevada era muy intensa, además de estar acompañada con aguanieve. En el helado viento, la cara de Zhuo Fan se puso tan blanca como el papel perfumado. Aturdido, se quedó parado junto a la ventana fuera del Palacio Changqing, escuchando la risa y el dulce jadeo de Mo Lan. Pensando en cómo el objeto de las caricias y los mimos del emperador había cambiado a otra persona, Zhuo Fan sintió como si un cuchillo le hubiera apuñalado el corazón. Deseó poder morir de inmediato.

Amaba tanto al Emperador Qing; ¿cómo podía este ser tan cruel con él?

Sin embargo, Xiao Han no se sintió mejor a pesar de fingir estar de acuerdo con el hermoso joven. En verdad no podía sentir el más leve interés al ver esta “cara infantil” de dieciséis o diecisiete años. Él simplemente metió la mano dentro de la ropa del joven para darle un par de caricias, pero sus jadeos sonaron aún más estridentes que un gato en celo. Además, lo que hizo que le dolieran aún más las bolas fue que por nada del mundo quería comer eso: ¡¡¡Malditas – gachas - con hongos - de nieve!!!

Maldita sea, era té de ginseng o todo tipo de gachas; era pastel de osmanthus o pastel de nuez. Como emperador, ¡también tenía derecho a comer unos muslos de pollo!

Xiao Han estaba a punto de vomitar por todas esas cosas dulces. Se preguntó si este Mo Lan era algún tipo de ángel que murió por comer demasiada sal en su vida pasada. Y por eso ¿esta vida estará llena de miseria para él si no se llena de dulces?

De pronto, Xiao Han tuvo un deseo: deseó algún día poder tener una pastura llena de alpacas, para así poder pararse en el patio todos los días y gritar: ¡Tu puta madre! ¡Tu puta madre!

Para ser honesto, esta extraña mezcla de drama serio y burla interna se sintió bastante extraña. ¿Será que todos los gong escoria, al igual que él, en realidad tienen corazones que siempre gritan escondidos bajo sus fachadas largamente sufrientes y románticas?

Xiao Han se aclaró la garganta y oscureció su expresión, indicando a Mo Lan que se llevara las gachas. Entonces, se vistió, caminó hacia la ventana y silenciosamente levantó una esquina de la cortina. Desde este ángulo podía ver una figura inestable a la distancia.

En esta parte de la trama, debería de ser hora de la aparición del llamado dolido-actor-de-reparto.

Después de haber sido relegado al asiento trasero en la trama, el Emperador Qing agarró un puñado de semillas de melón y comenzó a comerlas mientras se preparaba para disfrutar del espectáculo. Detrás de él, la cara de Mo Lan era de perplejidad; él estaba por avanzar y hacer todo lo posible por servir al emperador, pero en cambio, fue hecho a un lado.

¿Qué demonios está pasando?

La nieve disminuyó, pero la lluvia se hizo más intensa. Incluso si Zhuo Fan se escondió bajo del alero, aún así rápidamente se empapó. Sus extremidades estaban heladas, su rostro se veía falto de sangre y su cabello negro y húmedo se aferraba a su cuerpo. Sin embargo, sin importar cuán duro lo intentó, Xiao Han no pudo encontrar nada del imaginario trágico y sumamente hermoso usado en el guión. No vio nada de la “ropa mojada que delinea una figura delgada”, “una piel tan pálida que era casi translúcida”, o “una figura solitaria que se ve especialmente estoica, distante como la flor de la cima de la montaña”.

Hubiera sido más apropiado describirlo como un fantasma marino recién nacido.

Xiao Han estaba sin palabras. No era que quisiera ridiculizar a Zhuo Fan, pero... incluso mientras el guión se deleitaba en torturar al inútil shou y ponerlo en la posición de víctima patética, este le colmaba una variedad de frases que sonaban hermosas y causaban que la gente le tuviera lástima. Definitivamente las preferencias de este guión le enfermaban.

Zhuo Fan sintió un inmenso frío: su cuerpo estaba helado y su corazón tenía aún más frío pero su cabeza estaba muy caliente, ardía como si fuese a explotar.

Desconcertado, Zhuo Fan pareció ver a alguien acercarse con un paraguas en la mano. Las gotas de lluvia cayeron densa y rápidamente sobre la parte superior del paraguas. Por largo tiempo, sus ojos habían perdido su enfoque. En este mundo plateado, sintió que una figura alta lo envolvía con una capa cálida, sosteniendo el paraguas sobre su cabeza para protegerlo de la lluvia y la nieve.

Si tan solo... fuera el Emperador Qing.

Pensando eso, Zhuo Fan se desmayó.

Naturalmente este hombre no era el Emperador Qing; Xiao Han seguía escondido detrás de la ventana viendo el espectáculo.

Esta persona tenía una figura alta y magnífica, su rostro era atractivo y gentil, sus ojos oscuros y profundos eran especialmente cálidos: amplios y con largas pestañas, siempre daban la impresión de que rebosaban ternura y un cariño infinito.

Esta persona era Wen Muyan, quien acababa de heredar el título del Príncipe Wen, el único rey sin relación de sangre en la dinastía.

En la nieve, el Príncipe Wen sostenía un paraguas en una mano y con la otra rodeó los hombros de Zhuo Fan. Bajando la mirada, miró al hombre en sus brazos. La nieve y las gotas de lluvia que no podían ser bloqueadas por el paraguas cayeron sobre la capa negra y su largo cabello. Desde la distancia, la escena parecía una pintura en tinta más conmovedora y poética.

Xiao Han se comió la última semilla de melón y con una sonrisa en el rostro unió sus manos. Supuso que la ráfaga de nieve sobre esa cabeza podía crear la ilusión de un romance duradero que se mantendría hasta la vejez. ¡Vaya escena!

Mo Lan no sabía lo que el Emperador Qing veía, ni de qué se reía; simplemente le acercó en silencio un poco de té caliente.

Por supuesto, a Xiao Han no le importaba lo que otros pensaran, sus ojos seguían a Wen Muyan, quien intentaba cargar a Zhuo Fan. Recordando que el destino final de este fulano secundario era el de ser descartado por el shuo, Xiao Han no pudo evitar lamentarse: ¿Por qué tienes que pasar por tanto sufrimiento? ¿Por qué desperdicias tu afecto así?

Pasando las yemas de los dedos por el borde de la taza, Xiao Han bajó la cabeza y bebió el té. Cuando volvió a levantar los ojos, vio a Wen Muyan tropezar y casi arrojar a Zhuo Fan.

Xiao Han estaba un poco sorprendido y divertido. Inesperadamente, después de algunos pasos, el Príncipe Wen dejó de caminar y bajó a Zhuo Fan para tomar un descanso. Después de descansar un poco, volvió a levantar al otro hombre y continuó.

Esto casi hizo carcajearse a Xiao Ha: según su conjetura, esto definitivamente pasó porque Zhuo Fan era demasiado pesado para que Wen Muyan lo cargara. ¡Jajajaja!

Xiao Han observó a la pareja llegar a la esquina del corredor. Y tl vez porque el Príncipe Wen realmente no era lo suficientemente fuerte, o quizás porque era demasiado difícil caminar en la tormenta de nieve, el príncipe ya no pudo sostener al adulto entre sus brazos.

No tuvo más remedio que bajar a Zhuo Fan. Al mirar a derecha e izquierda y no ver a nadie alrededor, Wen Muyan se puso en cuclillas para descansar por un momento. Se frotó las palmas de las manos y exhaló sobre sus manos heladas, entonces se sacudió la nieve sobre su capa. Finalmente, dio dos vueltas alrededor de Zhuo Fan y pensó en una buena idea; sujetándolo de las manos, el Príncipe Wen arrastró al hombre inconsciente como si fuera un saco de arroz....

Arrastrándolo lejos …

Arrastrándolo…

Lejos…

Mo Lan miró con asombro cómo el solemne y sereno Emperador Qing escupía un trago de su té como una fuente. El joven estaba tan asustado que su alma perdió sus sentidos, se arrodilló en el suelo, temblando, y se declaró culpable.

—Su Majestad, ¿el té estaba demasiado caliente? ¡Este humilde servidor merece morir! ¡Este humilde servidor merece morir! ¡Su Majestad, por favor perdóneme!

—No es asunto tuyo. Largo — Xiao Han dejó a un lado la taza de té y agitó la mano con indiferencia. Cuando se asomó por la ventana y miró de nuevo, el corredor estaba vacío.

Se paró en silencio frente a ella y por un rato escuchó la tormenta, tenía una leve sonrisa en los labios. Este Wen Muyan parecía un poco más interesante de lo que había parecido en su vida anterior.


Corrección y estilo: Siboney69
⇒Traducción automática inglés español⇐
Traducción en inglés: Blackbox Translations
RAW: JJWXC

Notas de traducción CH-ESP
-Empresses in the Palace (lit. Las emperatrices en el palacio), también conocido como La leyenda de Zhen Huan y Hou Gong Zhen Huan Zhuan (后宫·甄嬛传), es una serie de televisión china basada en la novela de internet del mismo nombre. Se emitió por primera vez en China el 17 de noviembre de 2011.
Argumento: Es una adaptación de la novela del mismo nombre que relata las difíciles y tensas relaciones entre concubinas y emperatrices dentro de la Ciudad Prohibida durante el dominio manchú o dinastía Qing para ganar la atención del emperador de china, así como darle un hijo que fuese candidato a sucederle en el trono. [Fuente: Wikipedia]

-Clivia: Clivia es un género de monocotiledóneas oriundas de África meridional. Son perennes no leñosas, con hojas de color verde oscuro, largas y estrechas que producen racimos de flores acampanadas rojas o anaranjadas al final de un largo tallo, asemejándose a los lirios. [Fuente: Wikipedia]
君子兰 (Clivia miniata) // La flor mencionada en el capítulo es esta, pero la traducción en inglés la describió como “orquideas”.
↪ Me parece interesante recordar que en la cultura china las flores también tienen sus significados y quizás quisieran contrastar los del flor de ciruelo y la clivia:
“En China la flor del ciruelo simboliza lo noble e inmaculado, la firmeza. Durante los intensos fríos de la estación invernal, los arboles quedan sombríos y gélidos, las flores se han caído y están diseminadas por el suelo, solamente nos queda el ciruelo entre el hielo y la nieve, que desafiando al frio florece orgullosamente. Cuando florecen los ciruelos exhalan una especie de filtro que perfuma el corazón de la gente, en una antigua poesía se dice: “la fragancia de la flor del ciruelo que viene desde el frio”, es decir que el perfume que desprende la flor del ciruelo se genera después de que ha atravesado el frio, el verdadero significado de esta frase es que cualquier éxito ha tenido que experimentar antes sufrimientos, se ha conseguido después de realizar muchos arduos esfuerzos.
De la orquídea llamada clivia, la gente dice que se parece a un caballero modesto, es decir que es elegante y refinado pero que no busca la fama. Confucio dijo :”Zhi Lan creció en un aislado y profundo valle, donde no había personas ni reputación; hombre noble creció con un fuerte carácter moral, pobre pero integro”. El significado de esto es que las orquídeas crecen en remotas montañas no para esconder sus fragancias, de la misma forma que el caballero construye su buena moral, y aunque sea pobre sigue siendo una persona integra.” [Fuente: Panda Talk]

-Osmanthus fragrans: El olivo fragante, olivo dulce u osmanto oloroso es una especie de arbusto de la familia Oleaceae nativo de Asia, que se encuentra desde el Himalaya hasta China y el sur del Japón. [Fuente: Wikipedia]
 ↪ Pastel de osmanthus: “Las flores Osmanthus (gui hua, 桂花) son las flores de los populares arbustos de Osmanthus originarios del este de Asia. Estas pequeñas florecillas son famosas por su suave aunque tóxica fragancia. En China, las flores de osmanthus se han venido utilizando en comida y bebida como postres, vino y té. Aunque son de pequeño tamaño, su aroma es sorprendentemente fuerte. Por eso dicen en China: “Cuando las flores de osmanthus florecen, la fragancia se extiende a más de 10 millas.”.” [Fuente (y receta): Taesenz]

- Tremella fuciformis es una especie de hongo que produce basidiocarpos (cuerpos) blancos, tipo fronda, de contextura gelatinosa. Es una especie ampliamente distribuida siendo especialmente frecuente en los trópicos creciendo sobre ramas recientemente muertas o desprendidas de árboles de grandes hojas. Los micelios aéreos, de aspecto esponjoso, son cultivados con propósitos comerciales y son uno de los hongos más populares en la cocina y medicina china.​ Entre los nombres comunes de Tremella fuciformis se encuentran hongo blanco, hongo de la oreja plateada u hongo gelatinoso blanco. [...] En chino se lo denomina 银耳 (yín ěr; literalmente "oreja plateada"), 雪耳 (xuě ěr; literalmente "oreja de nieve"). [Fuente: Wikipedia]

-Sobre el juego de palabras(?) de las Alpacas: 羊驼 (Yáng tuó) significa alpaca y 草泥马 (cǎonímǎ) significa "caballo de hierba y barro", palabra homófona de 操你妈 (Cāonǐmā) que equivale a... un fuerte insulto.
En este articulo (sobre los insultos en chino) se explica mejor su significado: "操你媽 (caonima) o que se follen a tu madre es un insulto bastante utilizado en China y tiene una connotación bastante negativa y sucia. Si además le añadimos a este insulto más detalles, como por ejemplo el coño de tu madre, nos sale un insulto perfecto para insultar con potencia: 操你妈的屄 (caonimadebi) que significa que le follen el coño a tu madre. Sí, descriptivo y duro. Si estás quemado con alguien y quieres mandarlo a la mierda, repite conmigo:操你妈。
Afortunadamente tiene su cara divertida que es utilizada por los internautas chinos. En China ciertas palabras son siempre muy sensibles de ser borradas o de ser perseguidas directamente. Por tanto lo que han hecho los chinos es utilizar homófonos para utilizar estas palabras. Así no utilizarán 操你妈 (caonima) sino que utilizan 草泥马 (caonima). ¿Qué significa este último Caonima? es uno de los animales legendarios creados por los internautas chinos y que en fotografías y demás lo suelen personificar en la figura de un alpaca (más o menos como nosotros con el “ola k ase”).
Por si fuera poco también tienen la alternativa de 草泥马戈壁 (caonimagebi) que significa la Alpaca del Desierto del Gobi.[...]"


Nota personal: Como lo prometí, con esta historia hay más risas que lágrimas...
Hay dos partes que me encantaron de este capítulo, la primera es cuando al inicio se muestra como el emperador no necesita saber gobernar ni nada en absoluto, el guión se encarga de que exista paz y todo se haga por sí solo. La segunda parte que me gustó es el final... ¿se lo imaginan? El “fulano secundario” que no falta en toda novela “romántica”, el tipo dulce-considerado-siempre disponible, arrastrando a su pesado “objeto de interés”.... ¡es tan gracioso!
Creo que su comportamiento puede ya a estas alturas darles una mejor idea de por dónde va la historia...

Pero incluso si no lo tienen muy claro, no se preocupen. Más risas, y más situaciones absurdas nos esperan...

Gracias por seguir por aquí, por sus visitas y/o comentarios y como siempre, felices lecturas.

¡Hasta la próxima!

2 comentarios:

  1. Sospecho una segunda transmigración, sería divertido otro personaje queriendo cambiar su guión¡¡¡¡¡¡¡¡¡

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