[La Corte] Capítulo 6.2

Sintiendo como si todo su cuerpo fuese tan rígido como si hubiera sido aplastado por un elefante sobre una extensa llamarada, Wei Cai luchó por despertar de su sueño. Una mirada al reloj de la pared y vio que señalaba las 9 de la mañana.

“Cielos... ¡llego tarde!” Su conciencia le hizo exclamar en voz alta, obligando a su débil cuerpo a que se levantara. Sin embargo fue sostenido por un inesperado par de brazos.

“¡Hoy es domingo! No es necesario ir a trabajar.” Parecía ser un tono un poco irónico, Wei Cai escuchó en sus oídos una voz indescriptiblemente familiar .

Sintiéndose sorprendido, giró su cabeza. Vio que Li Jia De usaba su mano para apoyarse sobre la almohada y mostraba una cara sonriente.

“Cielos...” Wei Cai se sintió un poco confundido, exclamó con fuerza e inmediatamente recordó que el día anterior, debido a la cita a ciegas, se encontró con Li Jia De y su nuevo amante.

Al final, su humor era malo y fue a un bar a beber unas cuantas copas de whiskey, entonces al caminar de regreso a casa se mojó por la lluvia. Después de eso... su mente arrojó la apasionada escena nocturna y después la escena en el baño. La sangre de Wei Cai de pronto se apresuró en pánico hacia sus mejillas, sintió la necesidad de buscar un hoyo y esconderse.

Li Jia De, por el contrario, se veía muy feliz. Puso su mano en la cintura de Wei Cai y usó un profundo y significativo tono para burlarse, “Cuando estás dormido, eres muy bien portado. Respondes cualquier cosas que se te pregunta... eres más honesto en comparación a cuando estás consciente.”

“¿Qué...? ¿qué dije?” Con fuerza quiso arrancar el vello de la mano de Li Jia De, sin embargo su más grande descubrimiento llegó en este instante, “Yo... ¿por qué yo...? ¿por qué estoy desnudo?”

Recordando que había dormido una noche con Li Jia De mientras estaba desnudo, abruptamente tuvo un terrible dolor de cabeza.

Cuidadosamente tomó la cobija junto a él y se envolvió la cintura. Quería levantarse, sin embargo la ráfaga de un intenso mareo lo noqueó y cayó de espaldas sobre la cama.

Tirando de Li Jia De, dijo, “Será mejor que también te levantes, no dejes que te vean los vecinos. ¡Será un desastre si van y le dicen a la unidad!” Las personas que se quedaban en los dormitorios eran como él, un fiscal soltero. Wei Cai realmente temía dejar que los demás supieran que Li Jia De pasó la noche en su casa.

Li Jia De le dio una sonrisa tonta, firmemente acostó a Wei Cai y puso su mano sobre su frente. La sonrisa de inmediato cambió mientras decía, “Ah, tu fiebre no ha bajado. Déjame llevarte al hospital.”

“¡No quiero! ¡Soy un verdadero hombre, una enfermedad menor para ir al hospital, si otros lo saben se reirán...!” Sintiendo que no tenía fuerzas para ponerse de pie, Wei Cai convenientemente se quedó en la cama y cerró sus ojos.

“Debes tener hambre, cocinaré algo para que comas.” Li Jia De miró preocupado al débil Wei Cai mientras salía de la cama.

Al haberse vestido después de lavarse e ir a cocinar, el corazón de Wei Cai tuvo una fuerte sensación. Como cuando un libro describe el día siguiente de una pareja recién casada, una dulce mañana después de la primera noche de intimidad.

Teniendo una ciega y desordenada imaginación sobre algo. Si Li Jia De supiera lo que Wei Cai estaba pensando sobre él siendo su nueva esposa, ciertamente sus pulmones explotarían en furia.

Mientras esperaba a que terminara de preparar las gachas, Wei Cai se sintió mareado y comenzó a dormir nuevamente, haciendo que Li Jia De simplemente sacudiera su cabeza con impotencia.

Pero cuando Wei Cai durmió hasta la una de la tarde y seguía sin despertar, Li Jia De comenzó a entrar en pánico.

“Cai... Cai... come algo, no has comido nada desde la mañana...” Siendo forzado a despertar, Wei Cai se veía aturdido y entonces notó la cara de Li Jai De que estaba llena de preocupación.

“¿Qué te pasó...? Has seguido durmiendo hasta ahora.”

Dándose cuenta de que la enfermedad de Wei Cai era peor de lo que había imaginado. Li Jia De preocupado le tocó nuevamente la frente. Estaba igual de caliente que ayer.

“No es posible. Come un poco, ¡tengo que llevarte al hospital!”

Levantando la cuchara en la mano, Li Jia De lo alimentó con gentileza.

“Sabe bastante bien, ¿tú cocinaste esto?” Wei Cai lo elogió.

“¿Cómo es posible?” Li Jia De se rió, “Pedí a domicilio.”

Poniendo atención a la mesa, de hecho ahí había un par de platillos. No se veía como si Li Jia De pudiese cocinar todo eso.

Wei Cai no tenía mucha hambre. Li Jia De repetidamente le aconsejó comer medio tazón de arroz, para que levemente llenara su estómago. Wei Cai se inclinó hacia atrás, quería acostarse. Fue sujeto por Li Jia De.

“Mejor te llevaré al hospital...” Su voz estaba llena de preocupación.

“Si mañana sigo enfermo entonces iré...” Wei Cai sonaba como un niño consentido, nada como un hombre maduro en sus treinta.

“Entonces déjame acompañarte a dormir por un momento...” Desvistiéndolo, Li Jia De tiró de la cobija sobre Wei Cai, con cuidado se quedó a su lado. Sin energía para discutir permitió que lo abrazara hasta quedar dormido. Con el aroma de la colonia flotando en su cuerpo y el aroma de su propio cuerpo mezclándose, le permitió tener un cómodo ambiente familiar. Haciendo que sus frágiles nervios, debido a la enfermedad, se tranquilizaran.

Ajustó su posición a una más cómoda y sintió un par de fuertes brazos rodeándolo. En brazos de este hombre nació una sensación de seguridad que no existió en su corazón por largo tiempo....

Simplemente dejó que su ser fuese un poco indulgente, una vez que estuviera sano, entonces lo echaría....

Convenciéndose a sí mismo, Wei Cai se hundió nuevamente en un profundo sueño.

Fin del capítulo 6

Traducción al español: Siboney69
Traducción al inglés: forbidentry @ Livejournal

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