Capitulo 224: A último momento

Al día siguiente después de que Gu Hai estuviese de acuerdo con ayudar a Yan Yajing, fue a informar sobre la situación a Gu Wei Ting.

Gu Wei Ting se sintió muy feliz al escuchar la noticia, tanto así que no se quejó con él por tomar una decisión tan apresurada y tampoco buscó a la familia de la mujer para conocer las circunstancias. De hecho, simplemente asintió la cabeza y estuvo de acuerdo. Era como si su hijo no fuese un atractivo hombre codiciado, sino más bien un perdedor que todo el día se la había pasado buscando esposa. En tanto exista una mujer que lo quiera, no importa qué tipo de persona es, Gu Wei Ting la aceptaría fácilmente.

Gu Hai no había visto ese tipo de sonrisa en su cara desde hacía largo tiempo.

Después de enterarse de que Bai Luoyin no se machó al extranjero sino que se había unido al ejército, Gu Hai pensó preguntar sobre ello directamente a Gu Wei Ting. Pero enseguida desechó tal idea. Su papá era ya bastante mayor, y esta vejez no se reflejaba en su apariencia exterior sino en su actitud hacia su hijo. Gu Hai no recordaba cuanto hacia que él ya no gritaba ni gruñía. Cuando tus padres te piden tu opinión antes de tomar una decisión, es prueba de que ya han envejecido.

Gu Wei Ting y Jiang Yuan se encontraron con los padres de Yan Yajing.

Con el fin de dar una buena impresión a sus futuros consuegros, la mamá de Yan Yajing se aplicó un poco de maquillaje antes de salir del hospital, pero fue incapaz de ocultar por completo la imagen de la enfermedad. El papá de Yan Yajing también era un oficial superior en la Provincia de Shandong. Él y Gu Wei Ting se habían visto una vez, pero eso había sucedido bastantes años atrás, así que ninguno tenían recuerdos de haberse conocido.

Las dos familias se sentaron alrededor de una mesa, sonriendo todos.

Gu Hai tomó la mano de Yan Yajing y se puso de pie, mirando a Gu Wei Ting y a Jiang Yuan, dijo, “Esta es mi novia, Yan Yajing.”

Yan Yajing suavemente, pero con precaución, habló, “Tío.... tía.”

Jiang Yuan sonrió y respondió, “No pensé que Yan Yajing fuese tan hermosa.”

“Gracias tía.” Dijo Yan Yajing avergonzada.

Al ver por primera vez a su futura nuera, Gu Wei Ting cortésmente pronunció algunas palabras. “Mi hijo no tiene grandes habilidades o paciencia. Algunas veces no puede controlar su temperamento, lo cual fue heredado por mí. Cuando ustedes dos estén viviendo juntos, inevitablemente habrá discusiones. Es por eso que, cuando llegue el momento, espero que sean aún más tolerantes...”

Papá Yang comenzó a hablar también, “Lao Gu, es usted muy modesto. Ser capaz de casarse con su hijo es la bendición de nuestra hija.” Dicho esto, se giró y miró hacia Yan Yajing. “Solo tengo a esta hija única, ella siempre ha sido consentida. Incluso a esta edad, no sabe como cocinar. Honestamente, si su familia no la corre, estaré contento.”

Mamá Yan, al escuchar estas palabras, también sonrió y asintió.

Yan Yajing presentó a Gu Hai a sus padres, el cual respetuosamente se puso de pie, sostuvo su copa de vino en mano y brindó con el papá de Yan Yajing. A continuación, simplemente conversaron. Papá Yan estaba muy satisfecho con su futuro yerno. A decir verdad, él realmente era el hijo de un general. Sin mayor esfuerzo, sus gestos parecian dominar a cualquiera, no haciendo falta de valor. Además, su forma de hablar era realizada con determinación y su actuar con prudencia. Al poder confiar a su hija a tal tipo de hombre, podía sentirse aliviado.

Durante la comida, Jiang Yuan le dio un pinchazo a Gu Wei Ting, sonrió y dijo, “Lao Gu, mira a los dos, mientras más los vemos, parecen más compatibles, ¿no es verdad?”

Gu Wei Ting se rió pero no dijo una palabra.

Papá Yan le preguntó de improviso a Gu Wei Ting, “¿No tiene otro hijo?”

Jiang Yuan midió sus palabras, “Sí, nuestro hijo es un piloto de la Fuerza Aérea. Él solo tiene 26 años pero ya posee el rango de Comandante.”

Papá Yan les miró a ambos con ojos llenos de envidia, entonces preguntó, “¿Y ese hijo ya está casado?”

“Aún no.” Jiang Yuan dudó por un momento, sonrió, “Pero es probable que suceda pronto... pronto.”

Los ojos de Gu Hai la miraron firmemente y resplandecieron.

Mamá Yan agregó con voz ronca, “Ya que será pronto, ¿por qué no apresurarlo para que tengan sus bodas juntos? Así podrán cumplir los deseos de ustedes a la vez.”

“Nuestro hijo no tiene prisa,  y actualmente tiene muchas misiones. Lo cierto es que su vida aún no es muy estable por lo que esperar a que considere después el matrimonio no sería demasiado tarde. Lo principal es cuidar del compromiso de Gu Hai. ¡Si lo demoran por más tiempo, tendremos muchos remordimientos!”

“Sí, sí... pueden ver que mi salud no es muy buena. He estado esperando este ansiado momento de despedir a mi hija.”

“Con ver a su hija casárse, su corazón estará feliz. Quien sabe, su enfermedad podría ser curada.”

Las dos familias hablaron y rieron, la reunión fue muy armoniosa. Yan Yajing le dio a Gu Hai un poco de comida. La dulzura de esta joven pareja no podía dejar de brotar.

Gu Wei Ting no había bebido tanto en largo tiempo. Ni siquiera pudo caminar de forma recta al ir al baño, así que Gu Hai le ayudó.

Padre e hijo se lavaban las manos cuando de pronto, Gu Wei Ting le llamó y Gu Hai se giró hacia él.

Los ojos de Gu Wei Ting no tenían su fiereza usual, y con un profundo tono achispado habló, “En realidad, papá sabe que lo has pasado muy mal en los últimos ocho años...”

Las manos de Gu Hai se detuvieron; el flujo del agua de la llave sin cerrar chocaba constantemente contra las paredes internas del lavabo, al igual que los pensamientos y la tristeza infitinta que fluyó durante todos esos años.

“Papá, estás ebrio, salgamos.”

Gu Wei Ting agito su mano, “No tomé demasiado.”

Gu Hai se vio obligado a tirar de él. No sirve de nada decir algo ahora. ¡Solo déja que pase tranquilamente este año!

*  *  *

Los días llegaron rápidamente hasta el vigésimo octavo día del duodécimo mes lunar.

Ese día, temprano en la mañana, Yan Yajing fue arrastrada al vestidor para comenzar el pesado proceso de aplicación del maquillaje. Cuando salió más tarde fue rodeada por fuertes gritos, muchos de los cuales provenían de sus colegas de la compañía. Todas ellas tenían sus cámaras listas y fieramente comenzaron a tomar fotografías en cuanto la vieron emerger, y después de las tomas, algunas se quedaron para conversar con ella. Todo el recinto del banquete se volvió inusualmente animado.

Pasadas las diez en punto, los invitados fueron llegando uno tras otro.

Gu Hai permaneció de pie no muy lejos de la entrada y cuando vio a algunos amigos y familiares llegar, se apresuró a saludarlos.

Había estado esperando específicamente a alguien; este tipo de espera era igual a la de encontrarse siendo mordido por millones de hormigas. No sabía por qué esperaba ni qué iba a decir cuando dicha persona apareciera, era como tener el valor y la persistencia de no derramar lágrimas al ver un féretro.

Entonces, dos figuras familiares entraron en su línea de visión.

Los rabillos de los ojos de Gu Hai enardecieron. Aunque ya estaba mentalmente preparado, en el momento en que vio a Bai Han Qi y a Tía Zhou, aún así experimentó una ligera dificultad para respirar.

Bai Han Qi había envejecido, él incluso se encorvaba al caminar pero su simple y honesta sonrisa seguía intacta, mientras que Tía Zhou mantenía su apariencia honesta y simple. Ella siguió muy de cerca a Bai Han Qi, ocasionalmente mostrando una apariencia nerviosa.

Una vez que vio Gu Hai al otro lado, Bai Han Qi se detuvo.

El mocoso le llamaba 'tío' en aquella época ahora se encontraba usando traje y corbata, parado elegantemente frente a sus ojos. En un instante habían pasado ochos años; el hijo que se había dejado caer en el piso y arrodillandose ante sus pies, se había unido al ejército por él. Y ahora, la persona que había sufrido en un túnel oscuro y en soledad, soportando el hambre internamente por el bien de su propio hijo estaba por entrar a un reciento de bodas.

Gu Hai caminó hacia su lado, y habló con el tono un tanto inestable. “Tío, tía, están aquí.”

Tía Zhou quedó sorprendida por un momento, tomó el brazo de Gu Hai y le miró cuidadosamente, para enseguida girar hacia Bai Han Qi con sorpresa, “¿Este... este es Da Hai?”

“¿Qué tontería estás diciendo? ¿Por qué más estaríamos hoy aquí?”

Tía Zhou habló emocionada, “Mira, ¡este muchacho ha cambiado tanto! ¡Casi no te reconozco! En mi corazón sigues siendo el estudiante de preparatoria que siempre era el primero en ir a mi puesto de desayunos todas las mañanas. ¡En un abrir y cerra de ojos ya tienes tu propia compañía!”

Bai Han Qi le dio una palmada a Gu Hai en el hombro y alegre dijo, “¡Muchacho, el tío te da sus felicitaciones!”

Gu Hai recordó hace ocho años cuando los dos habían confesado su relación. Bai Han Qi también le dio una palmada en los hombros, era solo que en ese entonces no pronunció una sola palabra.

Gu Hai tranquilizó sus emociones y los dirigió a ambos hasta sus asientos como invitados.

En el camino, Gu Hai preguntó casualmente, “¿Cómo es que no vino Meng Tong?”

Tía Zhou sonrió avergonzada, “El plan de estudios de la preparatoria es muy riguroso. Sus exámenes finales están por llegar, así que tiene que estudiar. Por eso no le permití venir.”

Los ojos de Gu Hai se agrandaron, en su corazón recordaba a Meng Tong Tian como el chiquillo que todo el tiempo se aferraba a sus piernas y le llamaba hermano.

“Ya veo ¿Y cómo están el abuelo y la abuela?” preguntó Gu Hai.

Bai Han Qi repondió débilmente, “Uno falleció hace dos años, el otro falleció este año.”

El corazón de Gu Hai se hundió, no preguntó nada más.

Recordó que al abuelo siempre le gustó sentarse en un banquillo y usar una larga pieza rectangular de papel para enrollar los trozos despedazados del tabaco, rollo del que después fumaba una bocanada. Ua vez se acercó al abuelo para pedirle que enrollara uno para él y cuando lo fumó se dio cuenta de que la concentración era bastante fuerte. Cuando el abuelo vio su expresión retorcida, este rió con travesura un par de veces, exponiendo así su vieja dentadura incompleta.

‘¿Incluso tú no puedes controlarlo?’

‘Este pedazo de tierra está lleno de cultivos que el camarada Liu Shao Qi nos guió a plantar...’

‘Mao Du Du es el rojo, el sol más rojo.’

*  *  *

Bai Luoyin se había terminado de asear. Se cambió en su uniforme militar y se paró frente al espejo; portaba una presencia heroica.

El coche ya estaba listo y el conductor también le estaba esperando afuera. Bai Luoyin tomó la invitación que se encontraba sobre la mesa y rápidamente miro las dos palabras ‘Gu Hai’, entonces la cerró. Sus rígidos pasos se dirigieron hacia la puerta.

El clima en el exterior era un frío cortante.

Justo cuando estaba por subir al coche, de improvisto vio a dos figuras familiares pasando rápidamente a su lado.

Sujetó a uno de ellos y preguntó, “¿A dónde van con tanta prisa?”

“Hay una misión urgente. ¿No fuiste informado?”

Bai Luoyin siguió sin responder cuando los dos se alejaron rapidamente.

“Esperame aquí un momento.” Bai Luoyin le lanzó su billetera al chófer y fue tras los dos hombres.

“Ahora que las aeronaves enemigas han entrado ilegalmente a nuestro espacio aéreo, debemos enviar urgentemente a dos luchadores para interceptarlos. Por ahora, debido a que somos incapaces de determinar con precisión la velocidad y el rendimiento de las aeronaves, sus vidas pueden estar en riesgo en cualquier momento. Este es el momento indicado para ponerse a prueba, no diré nada mas, ¡escriban su última voluntad!”

Las caras de los dos piloros repentinamente cambiaron de color. Aunque ambos eran hombres con huesos de acero y que experimentaron numerosos ejercicios prácticos, pero cuando se trataba de la vida real y situaciones de muerte, ninguno se atrevió a asentir.

“¿Quieren desobedecer mis órdenes?” dijo el Jefe del Estado Mayor mostrando una cara sombría.

El corazón de ambos cayó en un profundo barranco.

De pronto, se escuchó una voz a sus espaldas, “Yo iré.”

El Jefe del Estado Mayor pareció no entender, se dio cuenta entonces que Bai Luoyin estaba parado en las cercanías.

Bai Luoyin estaba excepcionalmente tranquilo, “Yo iré y no tengo que escribir una última voluntad.”

Traducción al español: Siboney69
Traducción al inglés: RosySpell @ Wordpress
*Las frases que recuerda Gu Hai y fueron dichas por la Abuela Bai corresponden a los capítulos 38, 49 y 93.

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